********AVISO*********
Si tienes el tiempo y las ganas de leer este manifiesto, prestandole la atención que se merece, verás que se merece un par de comentarios, siendo un tema de tal actualidad, como es la educación.
Gracias a los que se atrevan a tragarse ésta parrafada.
************************
“Si me
acaricias con ternura y suavidad, Si me miras y sonríes Si me hablas y me
escuchas Seré muy feliz y Creceré mucho, mucho” Es evidente que la “educación”
constituye el caballito de batalla y la mágica solución a todos los problemas
que existen en nuestra sociedad. Analistas políticos, sociales, económicos,
profesionales de la educación y la salud, científicos, representantes de
organismos internacionales, etc., siempre concluyen que nuestra sociedad tiene
muchos problemas porque “la educación está mal”; porque hemos recibido una
educación deficiente, inadecuada, incompleta y con ausencia de “valores”.
Es
cierto que en nuestra sociedad existen diversos problemas y en todos los
ámbitos del quehacer humano: salud, educación, vivienda, alimentación,
infraestructura, economía, espiritualidad, trabajo, etc. Estos problemas forman
parte de nuestra existencia y hemos convivido con ellos durante miles de años y
en todas las épocas de la historia de la humanidad. De alguna manera se ha
intentado resolver algunas, buscando soluciones paliativas o temporales. La
gran mayoría de propuestas han sido actos fallidos, porque se ocuparon de los
síntomas más no la causa; adormecieron al cuerpo y disminuyeron el dolor, pero
no curaron la enfermedad. Los problemas en esta época de modernismo, se
manifiestan en el desorden urbano originado por el crecimiento descontrolado de
las ciudades y una deficiente planificación. El caos del tránsito, que provoca
congestión; la contaminación urbana, en todas sus formas de manifestación; el
mal uso de los espacios públicos, que es una costumbre cotidiana; son tan solo
algunas de las manifestaciones de esta enfermedad.
El desorden social
existente, manifiesto en la delincuencia urbana, la pobreza, el desempleo, la
informalidad, la prostitución infantil y adulta; que finalmente se convierten
en conflictos sociales y ambientales expresadas en demandas, reclamos y
protestas colectivas, marchas y los paros laborales. Estos conflictos locales,
nacionales e internacionales se inician con pequeños desacuerdos y se
convierten en grandes confrontaciones que despiertan pasiones colectivas y
violencia, debido a la manipulación de ciertos líderes que enarbolan banderas
de democracia, libertad, emancipación, patriotismo, nacionalismo, igualdad,
fraternidad, paz, amor, etc., y que bajo todos estos conceptos, solo ocultan
sus propios intereses.
Definitivamente podemos concluir que la sociedad está
enferma y padece dolencias originadas por los inadecuados estilos de vida
adoptadas por personas que forman parte de este sistema de vida aniquilador.
Saben dónde está el origen de todos los males de nuestra sociedad?. En el ser
humano, o sea en cada uno de nosotros, quienes somos los únicos responsables de
todo lo que sucede. Preguntémonos quien perturba, contamina y degrada la
naturaleza hasta alcanzar niveles inimaginables de muerte y desolación; quien
provoca las guerras creando y comercializando armas letales: bombas atómicas,
nucleares, armas biológicas, que están acabando con la humanidad y ponen a
naciones enteras y a personas inocentes en zozobra; quien ha creado las
diferencias sociales, culturales, económicas, y en consecuencia, la exclusión,
la desigualdad, la violencia y la pobreza en todo el planeta; quien ha creado
leyes con nombre e intereses propios, con la única finalidad de controlar y
dominar a sus semejantes; quien ha sembrado el terror y ha credo pandillas,
violencia urbana, guerrillas y terrorismo; quien ha creado las grandes
industrias de alimentos chatarra, de fármacos, insecticidas, pesticidas,
detergentes, y un sinfín de productos que se venden con toda libertad y sin
ningún control en los mercados, y que todos sabemos que contaminan, enferman y
están matando a la humanidad, pero no hacemos nada por impedirlo.
La lista de
problemas es muy extensa, pero la respuesta a la pregunta que se planteaba al
inicio es simple y única: el ser humano es el único responsable y es el que
promueve y origina todo esto. Parece que nuestra humanidad está muy enferma.
Unos son enfermos mentales porque provocan todos estos problemas y la otra
parte son enfermos letales porque son los consumidores y receptores de toda la
basura que crean los primeros. En fin, los problemas son muchos, muy diversos y
cada día se incrementan sin control y a vista y paciencia de las autoridades y
los gobernantes. Las propuestas de solución son lentas, escasas, desarticuladas
y de bajo impacto. En este sentido lo más fácil es no asumir responsabilidades
y buscar culpables en otros. Por ello calificamos a la educación como
anacrónica, deficiente, violenta, teórica, rígida, individualista, competitiva,
represiva, etc., y descalificamos y culpamos a las autoridades, a los
profesores, al sistema, a las metodologías, a la infraestructura, a la crisis
económica, a la corrupción, al gobierno, etc. Pocos son los que asumen sus
responsabilidades y proponen nuevas alternativas de solución. Es necesario
empezar a pensar en diseñar una educación que forme personas solidarias,
integradas, honestas, auténticas, coherentes con su realidad y que aprendan a
servir a su comunidad y contribuyan a solucionar los problemas existentes.
Ahora podemos comprender porque tiramos la papa caliente a la educación y
porque ésta se encuentra tan manipulada y permanentemente en tela de juicio. La
violencia educativa manifestada en el bulling, el bajo nivel de rendimiento de
los alumnos y la deserción escolar, son consecuencias de todos los problemas
que la sociedad tiene.
En este sentido es necesario plantearnos las siguientes
preguntas: ¿Cómo esta nuestra educación actual? ¿Qué clase de persona, ciudadano
y profesional queremos en nuestra sociedad? ¿Qué clase de educación necesitamos? ¿Qué debemos hacer para lograrlo? Las tres preguntas son muy difíciles de
responder porque necesitamos ser completamente libres, muy coherentes,
honestos, auténticos y estar alejados del “Sistema”, para poder dar una
respuesta real.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
No hay moderación de comentarios, por lo que te pido que comentes respetuosamente y sin hacer spam. Si faltas el respeto, borraré tu comentario y si haces spam, lo borraré igualmente.
Ante todo, gracias por comentar.
Besis :D