Le dije que todo llega a su fin, que lo nuestro acabaria de una forma u otra, pero que mientras durase disfrutaria cada minuto que pasasemos juntos. Me contesto que ya lo sabia y que le encantaria disfrutar de ese tiempo conmigo. Mire el teclado borroso a tra ves de mis lagrimas de júbilo, y me di cuenta que habia conseguido expresarle mi amor a esa persona sin pronunciar la frase prohibida. Esa frase envenenada que mantiene a las personas unidas a traves del espacio tiempo para bien o para mal. Esa frase posesiva y diabolica que duele destruir ,pero que en ocasiones duele mas conservar. Ese maldito: te quiero.
Que bonito microrelato... :'( La verdad que si que es una frase prohibida y que en estos tiempos se dice mucho a la ligera, cuando debería decirse en el momento en el que realmente lo sientes.
ResponderEliminar¡Me encantó! ^^
Por cierto, tienes un premio en mi blog :)
¡Besines!